¿Tú sabes por qué los caracoles tienen cuernitos?
Se dice que una vez un venado muy solitario no tenía con quién jugar, paseándose por el bosque se encontró en una rama a un caracol, el venado muy contento le preguntó si quería jugar con él.

El caracol muy inteligente le preguntó de que trataba el juego, entonces el venado le dijo que muy fácil:
-Caracol: mmm… lo dudo, pero, ¿sí es una carrera debería haber un premio para el ganador no? ¡Yo propongo que el que gane le den una CORONA!
-Caracol: mmm… lo dudo, pero, ¿sí es una carrera debería haber un premio para el ganador no? ¡Yo propongo que el que gane le den una CORONA!

-Venado: ¡bueno… está bien! De todas formas, yo ganaré. ¡El primero en llegar a sentarse en la piedra que está al final del sendero será el ganador!
El caracol aceptó el reto, al momento de empezar la carrera, el caracol se lanzó a la cola del venado y él sin darse cuenta empezó a correr, ¡sin duda era muy veloz!, pero al llegar a la meta, cuando el venado intentó sentarse, el caracol se lanzó sobre la piedra sin que el venado se diera cuenta, entonces este escuchó la voz del caracol:
-Caracol: ¡Cuidado Venado! ¡Hace horas que te estoy esperando!
El venado muy sorprendido y preguntándose ¿cómo pudo suceder? Le ofreció sin más su corona.
Es por ello que en ciertas temporadas cuando a los venados les crece demasiado los cuernos se les cae como símbolo de ofrenda hacia los caracoles por haber obtenido la victoria de dicha carrera.
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